Nicki Minaj sale a defender su corona en "Queen"
En su primer álbum en 4 años, Nicki Minaj presenta su material más provocador ante una industria musical que amenaza su reinado
Por casi una década, Nicki Minaj se ha establecido como la
figura predominante del rap femenino, si bien han existidos muchas predecesoras
que han influenciado el sonido de Minaj, como Lauryn Hill o Lil’ Kim, ninguna
había logrado mezclar con tal éxito las listas urbanas con las listas de éxitos
pop. Su rápida lengua, letras provocadoras y su personalidad irreverente le abrieron
paso a la rapera para ser tratada como una diva del pop, y es que sus grandes
hits toman influencias del género, Starships o Super Bass se han
convertido en iconos dentro de su repertorio, así como también sus sencillos
más controversiales como Anaconda que han demostrado la
adaptabilidad de la trinitense entre estos dos mundos musicales.
Pero la industria musical que enfrenta con su cuarto álbum, Queen, es diferente a aquella que conquistó
en 2014 con The Pinkprint. Por primera vez en su carrera, Nicki Minaj lanza
un álbum al mismo tiempo que otra rapera femenina está en la cima, el éxito de Cardi B amenaza el reinado de un género
que pareciera no aceptar más de una mujer en la cima del hip hop. Minaj es
consciente de que la competencia esta vez es real, no porque dude de sus
capacidades, sino porque comprende una industria musical que continuamente va
rotando de artistas favoritos.
En su cuarto material, Nicki se muestra decidida a demostrar
porque es la reina del género, con un disco mucho más cercano a las raíces del
rap y a sus primeros mixtapes, y alejado de la tendencia trap de los sencillos
más exitosos de sus contemporáneos. “No
puedes usar una peluca de Nicki y pensar que eres Nicki/ eso sería como un
gordo pensando que es Biggie”, sentencia la rapera en el track inicial Ganja
Burn, referenciando a sus competidoras y adelantando que este material
será su traje de guerra, lanzando indirectas a quienes algunos asumen ser Cardi
B, “al menos puedo decir que escribo cada
verso que escupo”.
Barbie Dreams llega justo para hacernos olvidar una melosa
colaboración con Labrinth y Eminem, el track en honor a Biggie
Smalls (usando la misma base que su track Just Playing), se destaca por
recordarnos todo lo que amamos de Nicki Minaj, letras provocadoras sin
disculpas con una divertida narración que deja al que escucha atónito ante cada
línea dedicada a un famoso rapero: “Drake
vale un millón de dólares, siempre comprando mierdas/ Pero no sé si me tiene
húmeda o ya está llorando y esas mierdas”. Y es que Nicki Minaj tiene un
doctorado en referencias, esta es su cultura y sus letras reflejan a una mujer
que sabe cómo jugar el juego del rap.
Nicki Minaj - Barbie Dreamz
Pero Nicki Minaj entiende que la industria demanda hits, y
sus intentos no son sutiles, las colaboraciones con Ariana Grande en Bed o The Weeknd en Thought I Knew You parecen tener
todos los elementos para asegurarse un éxito, sin embargo, la formula del coro
pop tras los versos de rap se ha agotado. Atrás han quedado los años donde las
divas pop reinaban cada lista por haber, el trap y el mumble rap se han
apoderado por completo de los números uno y este es un género ajeno a Minaj,
por lo que las estás colaboraciones quedan a la deriva dentro de un álbum más
comprometido a ser fiel a las raíces del rap con el que la cantante creció.
Si bien Queen es un nuevo álbum en cuatro años, nunca
extrañamos a Nicki Minaj, y es porque jamás tuvimos la oportunidad. No hubo
ocasión entre 2014 y 2018 que la cantante no sacara sencillos promocionales o
colaboraciones con otros raperos, por lo que su nombre siempre ha estado presente,
lo que de cierta manera provoca una sobresaturación ante una audiencia que
demandaba una nueva voz femenina entre tantos raperos masculinos. Esto, sumado
a sus conflictos con raperas como Remy
Ma, han hecho que Queen se estrene en el momento más inestable de su
carrera. Pero como buena estudiante, Nicki Minaj les saca provecho a estos
problemas: “Oh, ya entiendo, huh/ Me
están pintando como la mala de la historia/ Pero ¿cuándo fue la última vez que
vieron a una chica mala mandando en el rap como yo?”, ataca Minaj en la
triunfante Chun – Li, donde asume el papel que la audiencia ama odiar, la
de la villana de la historia.
Nicki Minaj – Chun – Li
El track final es un caso curioso en la carrera de Nicki
Minaj, una colaboración con otra rapera femenina, en una industria empecinada
con poner a raperas una contra la otra, Minaj y Foxy Brown unen fuerzas en la increíble Coco Chanel, demostrando
que la unión entre mujeres es más poderosa que los conflictos.
Queen es un nombre grande para un álbum, el cual forzaba a
la rapera a demostrar ser merecedora de tan importante título. Y Nicki Minaj lo
hace con creces, su talento sigue intacto, si es que no más eficaz, pero a su
vez deja entrever que su reinado no es tan estable como todos pensábamos, sino
que puede, y ahora debe, convivir al mismo tiempo con más de un reinado
femenino.
Artista: Nicki Minaj
Álbum: Queen
Género: Rap
Lanzamiento: Agosto 2018
Duración: 1hr. 6 min.
Discográfica: Young Money – Cash Money
Por Fabián Núñez

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