Zenzero: Lo rico de lo sano



Cuando se habla de postres, uno de los alimentos que llegan a la mente sin mucho esfuerzo, son los helados. Los hay en diferentes y variados sabores y se acomodan a cada temporada. Están los de agua (“para la sed y el calor”, vociferan los vendedores ambulantes), los de crema (tan espesos como deliciosos) y hasta una variedad clásica invernal elaborada con malvavisco y barquillo, el famoso “helado de invierno”. Sin embargo, al tratarse de uno de los comestibles dulces por excelencia, tentación para grandes y chicos, ha acarreado una fama que de alguna manera lo ha posicionado como emblema de aquello no saludable. El típico placer culpable.

¿Y es que acaso lo rico no puede ser sano? Aquí es donde Zenzero dice presente. Esta heladería cuenta con una sucursal ubicada en el Costanera Center y otra emplazada en el segundo nivel del Mall Plaza Egaña, siendo esta última la sucursal que nos convoca. Elaborados con ingredientes importados exclusivamente desde Italia, sus productos destacan por entregar una experiencia que puede ser disfrutada por todo público. Posee una línea tradicional y otra Healthy (saludable), ambas disponibles en formato pasta y paleta.

Lo cierto es que en la actualidad las personas se han vuelto cada vez más conscientes respecto a lo que consumen. La Ley de Etiquetado de Alimentos se ha encargado de restregarnos en la cara los hábitos alimenticios que eventualmente nos enfermarían (o que en su defecto, ya nos enfermaron). Por lo mismo, para muchos, el inocente acto de comprar un helado se ha transformado en un dilema.

Zenzero se jacta de que sus helados no tienen sellos negros, siendo también aptos para veganos. No obstante, lo que hace aún más atractiva a esta heladería es que su línea Healthy se subdivide en secciones especialmente diseñadas para el público más exigente. Los intolerantes a la lactosa y los celíacos encontrarán aquí su santuario para golosear. Los helados sin lactosa, sin gluten y sin colesterol son su especialidad.

Al acercarse al mesón, la increíble cantidad de especiales sabores saltan a la vista, y no con pocas ganas de saltar al paladar. Canela, limón jengibre, mandarinetta, mascarpone mango, turrón italiano y sésamo, son algunas de las tentaciones tras el mostrador. Unos fabricados a base de agua y otros de leche. El personal se presenta dispuesto a guiar al cliente de acuerdo al requerimiento de cada uno. Si es diabético y se quiere dar un gustito, aquí también es bienvenido, pues hay helados con stevia o simplemente sin azúcar añadida.  Hay hasta una línea con probióticos para aquellas personas que no tienen alergias graves, pero que son delicados de guatita.

Los bowls de Zenzero son una magnífica manera de familiarizarse con la marca. Se trata de un vaso con dos sabores de helado a elección, más un superalimento (que puede ser maqui, chía, entre otros), además de dos frutas para complementar. Un chorrito de caramelo es ofrecido como broche de oro. La consistencia de sus productos es exquisita y realmente se destaca por sobre otras cadenas. Sabores tan tradicionales como “Invierno Suizo”, que es básicamente chocolate con almendras, o lúcuma a la crema, no dejan esa sensación de aburrimiento por tratarse justamente de sabores ya conocidos. La receta, al parecer, está enfocada también en que el sabor sea un distintivo a la hora de comparar. El precio de sus productos se corresponde al servicio entregado, sin que este sea demasiado elevado. Por cerca de tres mil quinientos pesos se puede adquirir un bowl que fácilmente puede ser compartido por dos personas sin que ninguno quede con hambre, pero sí con ganas de más.


Por Carolina Velásquez.


Zenzero
Dirección: Av. Larraín 5862, 2º Piso, La Reina (Mall Plaza Egaña)

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