SHREK: La saga con la que crecí

Siendo sincera, no sé cómo abordar esta crítica, ¿cómo hablas de una película que te trae tantos recuerdos a lo largo de tu vida y que se conecta con tanto?

De esta forma, si nos ponemos a pensar cuál es la mejor etapa de nuestras vidas, sin duda podríamos decir que la infancia. Al menos, para mí, es así. Sin grandes responsabilidades, rodeada de amigos, pensando solo en jugar y salir a la calle.

Fue en ese periodo de mi vida en el que conocí a Shrek. Una adaptación del libro de William Steig, que llegó a las pantallas gracias a Andrew Adamson y Vicky Jenson en 2001. Esta película me pareció fascinante desde el primer momento, su estilo de narración, tal como si fuera un cuento de hadas y abarcando en el film un sinfín de criaturas mágicas, esos personajes carismáticos con los que tanto nos divertimos, como Burro, con esa torpeza simpática que lo caracteriza, Fiona, una mujer (ogra) empoderada y divertida, Shrek un ogro que aparenta ser antipático, pero en el fondo es agradable y chistoso. Así también podemos mencionar a los cerditos, pinocho, entre otros. 

Tenía 4 años cuando se estrenó esta película, sin embargo, no fue hasta los cinco o seis años cuando la pude ver en VHS en la casa de los padrinos de mi hermano. En ese hogar había una niña con la que jugábamos junto con mi hermana menor. Perdí la cuenta de cuántas veces vimos Shrek allá. No entendía mucho de la trama, pero me encantaban los personajes. 

Todavía recuerdo cuando cantaba la melodía del castillo de Lord Farquaad, momento donde Shrek y Burro llegan al pueblo de Duloc (la verdad es que todavía lo hago), para solicitarle al futuro rey que les haga entrega del pantano que fue invadido por los personajes mágicos. 

Nunca dejé de ver Shrek y a medida que crecía comprendía mejor la historia que se iba desarrollando a lo largo del film.  La originalidad con la que se narra, su animación y sin duda la interpretación de los personajes que ya conocíamos, porque prácticamente, se nace sabiendo sobre estos cuentos de hadas, generan el éxito que tuvo la película y a esto se le agrega la propuesta cómica, lo que llevó a que se continuaran elaborando nuevas historias.

Así, puedo decir que fui creciendo con Shrek y con estos personajes que me acompañaron en distintas etapas de mi vida. En 2004, cuando tenía siete años, se estrenó la segunda parte de la saga. Sin embargo, pude verla uno o dos años después de su debut, en mi casa habían comprado un DVD y mi mamá nos regaló el filme en CD. Recuerdo que era la única película que con mis hermanos teníamos y la disfrutábamos a concho, en serio, la veíamos casi todos los días después del colegio.

Fue en esta parte donde conocimos nuevos personajes antagonistas, como el Hada Madrina y su hijo El Príncipe Encantador y un amigo que se sumaría a las aventuras del ogro, El Gato con Botas, un adorable y carismático gatito. Además, conocimos a los padres de Fiona y el secreto que guardaba Harold (padre).

Por esas fechas, mis padres trabajaban, entonces nos quedábamos solos en casa por las tardes y junto con mi hermano y hermana, conectábamos los parlantes del equipo y en la parte en que Shrek se tira un gas, poníamos la radio a todo volumen y nos divertíamos con eso.

También, me acuerdo que colocábamos la película en cámara lenta cuando los personajes ponían caras graciosas, como cuando la Hada Madrina se lleva a Harold en su carro mágico y comienza a comer unos tacos o cuando burro se convierte en caballo. Podíamos pasar horas disfrutando de distintas formas el film, no había límites.

Sin embargo, no todo podía ser perfecto. Shrek en 2007 lanzó su tercera parte y prometía bastante, ya que las dos películas anteriores habían sido absolutamente brillantes por todo lo que conllevaba su originalidad (personajes, ritmo, historia, diversión). Sin duda, Shrek tercero tenía una expectativa muy alta, la que no logró cumplir.

Recuerdo que esa película no la vi inmediatamente cuando salió, de hecho, la descubrí después de Shrek Para Siempre. Esta tercera parte no me gustó tanto y no tuvo que ver con que ya había crecido, sino que de verdad la película era un tanto aburrida. 

El filme nos sitúa en el país de Muy Muy Lejano, donde el rey Harold justo antes de morir, y en presencia de su esposa Lilian, su hija Fiona, y Shrek, nombra heredero al trono al ogro. Sin embargo, a Shrek no le emociona la idea de convertirse en el nuevo rey. El ogro, en esta parte, ve tanto en la corona como en el embarazo de Fiona demasiados cambios en su vida. Así comienza esta aventura junto a Burro y el Gato con Botas en busca de un pariente de Harold, Arturo, al que quiere instaurar en el trono. Mientras tanto, el Príncipe Encantador se dedica a reclutar a todos los villanos de Muy Muy Lejano para quedarse con el poder y cambiar así la historia de los cuentos. 

Si bien la trama suena entretenida, lo cierto es que esta parte carece de ese humor al que estuvimos tan acostumbrados en las primeras partes. A esto hay que sumarle que hay personajes que pierden protagonismo, como Burro. Lo anterior, para enfocarse más en Arturo y en las princesas. De esta forma, esta película pasó casi desapercibida por mi vida. De vez en cuando la veo en la televisión, pero nunca la he buscado, como si lo he hecho con las otras partes (1,2 y 4).

Luego de este salto en mi vida, vuelvo a Shrek Para Siempre, una película que fui a ver al cine junto a mis amigos de infancia en el año 2010. Ya tenía 13 años. Recuerdo que todos pedimos permiso y juntamos dinero de los vueltos del pan para ir a ver la tan ansiada cuarta parte. Era la primera vez que iba al cine y estaba demasiado feliz y ansiosa.

Después de la originalidad y el humor de la primera y segunda película, esperábamos sorprendernos y volver a reencontrarnos con esos personajes tan queridos y admirados por tantos niños y por nosotros mismos.

Al cine acudieron adultos, niños y jóvenes, todos entusiasmados por la cuarta y última parte y la verdad es que nos encontramos con un humor renovado, una mejor calidad en imagen y un nuevo guion.

Disfruté a concho esa experiencia del cine y debo decir que la película consiguió mantenernos inmersos en la historia, la que da un nuevo giro a los personajes ya existentes y agrega otros, como el antagonista Rumpelstinkin, el ejército de ogros, las brujas, el flautista de Hamelin, entre otros.

Esta nueva parte nos ofreció humor, mucho más drama que en las películas anteriores y una argumentación sólida. Sin embargo, no pude disfrutar bien el film en el cine, ya que en los momentos de mayor tensión un señor se reía sin razón alguna de lo que ocurría y mis amigos y yo nos terminamos burlando del pobre hombre. Además, era mi primera vez conociendo esas pantallas gigantes y comiendo cabritas, puesto que no pueden culparme, era una niña conociendo algo nuevo. 

Esta película la vi en reiteradas ocasiones en mi casa y pude disfrutarla mucho más y debo decir que me gustó bastante, pero nos deja ese amargo sabor de la idea de que es la última parte de Shrek, las historias del ogro verde con sus dedos de salchicha, ha llegado a su fin. El film con el que crecí, con el que me divertí, con el que bromeé y tuve mi primera experiencia en el cine. 

Esta película llegó a revolucionar el cine de animación, haciendo que, incluso, adultos se interesen por ella, ganando el primer Oscar a la mejor película de animación de la historia, abriendo paso a la competencia con Pixar y realizando un estupendo doblaje en español con Mike Myers, Eddie Murphy, Cameron Diaz, John Lithgow, Vicent Cassel, Antonio Banderas, John Cleese y Larry King. Además, no puedo dejar de mencionar que ha abandonado la idea de las princesas indefensas y la historia donde la damisela está en apuros y el príncipe es apuesto. Pero lo mejor es Burro, ese personaje divertido y con carisma, quien muestra un grado de estupidez y que en la realidad puede llegar a irritarte, pero que le da esa chispeza a la película, ¿qué sería Shrek sin Burro?

Shrek ha sido la película más importante en mi vida y hasta el día de hoy hago mis maratones de esta saga. Me sé todos los diálogos, todos los cantos e incluso, tengo las imágenes grabadas en mi memoria. Sin embargo, también debo decir que, con el paso de los años, he descubierto cosas nuevas en las películas, esos chistes doble sentido, los asesinatos y las tramas.

Pero debo confesar que si hay películas que creo nunca superaré, porque son parte de mi historia, son las de Shrek.

Por Camila Tapia Marchant

Shrek1

Fecha de estreno: 12 de julio de 2001 (Chile)

Directores: Andrew Adamson, Vicky Jenson

Sherk2: Un viaje a Muy Muy Lejano

Fecha de estreno: 18 de junio de 2004 (Chile)

Directores: Andrew Adamson, Conrad Vernon, Kelly Asbury

Shrek Tercero

Fecha de estreno: 6 de mayo de 2007 (Los Ángeles)

Directores: Chris Miller, Raman Hui

Shrek Para Siempre

Fecha de estreno: 8 de julio de 2010 (Chile)

Director: Mike Mitchell

Año: 2010

Recaudación: 752,6 millones USD