"Scrooged" (1988): Los años pesan



Recuerdo tener unos 10 años y toparme con Scrooged (1988) en La Red una noche cercana a la Navidad del 2004 o algo así. Esta adaptación de "A Christmas Carol" me mantuvo pegado al televisor, encantado por sus terroríficas imágenes y, a ratos, perturbador ambiente. Supongo que por sentir que estaba presenciando algo un poco más adulto que  las típicas historias navideñas de brillantes colores y mensajes de amor y familia. Amaba ver la desesperación de Bill Murray siendo atormentado por extraños fantasmas.

Hoy, 14 años después, me dispuse a revisitar esta película. ¿Cómo ha envejecido esta adaptación del clásico de Charles Dickens?

Desde el inicio, Scrooged me logra enganchar. La película se inicia con una secuencia que muestra al “viejito pascuero”, Santa Claus, defendiéndose con armas contra terroristas que quieren detener su misión mientras es auxiliado por una figura heroica cliché al más puro estilo de Bruce Willis en Duro de Matar. Entendemos que la escena es parte de una de las producciones de IBC, cadena de televisión donde Frank Cross (Bill Murray) es un alto ejecutivo que dirige con su despiadada e inhumana personalidad, un verdadero Scrooge.

Así mismo, descubrimos que la cadena prepara un especial en vivo de “A Christmas Carol”, cuya historia comienza a generar paralelos con la vida de Cross. Éste no tiene escrúpulos en despedir a uno de sus empleados, Eliot Loudermilk (Bobcat Goldthwait) en noche buena, retener el aguinaldo de su explotada secretaria Grace
 (Alfre Woodard), declinar invitaciones de su familia y regalar toallas producto de su tacaña existencia. Todo hasta que es visitado por el fantasma de su ex jefe quien le anuncia que será visitado por otros tres espectros antes de navidad.

Bill Murray como Frank es lo que esperarías de Murray en una de sus películas ochenteras. El típico idiota empedernido y sarcástico que entrega sus líneas con cara de póker, como si estuviese muerto por dentro, o bordeando la crisis nerviosa por su exaltado enojo con el mundo. Un tipo de humor característico de la época pero que no ha envejecido bien para mi gusto. Acepto el humor Dead pan siempre que esté acompañado de un juego de palabras creativo pero aquí las bromas parecen solo soportarse sobre la forma en que se entregan más que en el contenido. Sin embargo, destaco que Murray se presenta como un personaje tan miserable que los momentos en que se muestra más humano son creíbles y agradables.

La película también cuenta con altas dosis de humor físico o Slap stick. Las típicas situaciones donde alguien sale herido de manera cómica fueron extremadamente hilarantes para mi yo infantil obsesionado con Tom y Jerry y Bugs Bunny. Sin embargo, mi yo de 24 años espera algo más que solo golpes porque sí. Además, mucha de la comedia de este tipo se centra en una broma misógena donde la censora de la producción (presentada como una mujer desagradable por hacer cumplir con su trabajo) sale lastimada en varias oportunidades. Además, de otras situaciones relacionadas a la cosificación de la mujer tan típicas en películas de la época. Esto es por lejos, lo que peor ha envejecido, no hubo risas para mi.


Otro elemento que no ha envejecido bien es el interés amoroso de Frank, Claire (Karen Allen). No me malinterpreten, disfruto mucho de la bondad de su personaje que pasa la navidad haciendo voluntariado en un albergue y es sumamente carismática. Sin embargo, tengo problemas con su amor por Frank. Si bien, luego entendemos que su relación comienza cuando Cross no era tan amargado, sus personalidades enteramente contrarias no dan sustento a que ella se mantenga tan dispuesta a ayudarlo de manera incondicional. La figura la mujer como alguien que está siempre tratando de ayudar al hombre de sus sueños bajo un velo de romanticismo patriarcal no me agrada en lo absoluto.

A pesar de los puntos anteriores, no todo es malo en Scrooged. Hay elementos que han envejecido sumamente bien y se sienten demasiado actuales. La película es una comedia negra y satiriza a la perfección la figura del magnate televisivo obsesionado con el raiting a punta morbo, violencia y crueldad. El comercial que Frank prepara para el especial de “A Christmas Carol” no tiene nada que ver con la historia de Scrooge pero busca enganchar a la audiencia con mensajes sobre terrorismo y catástrofes. El anuncio incluso mata de un infarto a una televidente, hecho que alegra a Cross porque ayuda en la publicidad. Además, la mencionada película de navidad mezclada con acción y el hecho de que el director de la cadena evalúe a perros y gatos como posibles consumidores me parece sumamente creíble e hilarante dentro del concepto de la sátira.

Otro punto a favor de la película es que muestra a Frank como un ser que ha sido deshumanizado por su afán de éxito. Un hombre sumamente trabajólico, cruel y desconfiado que de se ha alienado producto de su obsesiva búsqueda del sueño capitalista.


Los fantasmas, por otro lado, son el plato fuerte de la película. El perturbador ex jefe de Frank (John Forsythe) un cuerpo en descomposición atormentado por sus malas decisiones de vida. El loco taxista que se presenta como el fantasma de las navidades pasadas (Davis Johansen) con su magnética personalidad. La hilarante hada de personalidad pasiva-agresiva que corresponde al fantasma de las navidades presentes (Carol Kane) y el tétrico fantasma de las navidades futuras que incluso hoy logra erizarme un poco los pelos. Cada versión es una frescas representaciones del clásico cuento de Dickens. Los efectos y el maquillaje que los acompañan también son creíbles aún, a pesar de ser una película del 89.

Scrooged tiene altos y bajos. Si bien, tras 15 años hubo menos risas. Aún hay elementos que puedo disfrutar en mi adultez y que son sumamente actuales a pesar de lo antigua que es la película. El film sigue siendo una experiencia un cuento cínico sobre el espíritu navideño que termina con un Bill Murray dando un discurso sumamente cliché a la vez que un borracho y acabado Loudermilk tiene de rehén al equipo del switch del programa. La obra del director Richard Donner intentó algo nuevo al modernizar un clásico y eso sigue siendo apreciable aunque las fallas que se pueden detectar en nuestros días le pesan.



Por Cristián Canales Villa

Ficha técnica
  • Director: Richard Donner
  • País: Estados Unidos
  • Año: 1988
  • Género: Comedia
  • Duración: 101 minutos
  • Producción: Mirage Productions

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